Envejecer con salud es uno de los grandes retos de la población peruana. No se trata solo de vivir más años, sino de hacerlo con calidad de vida. Según la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), casi 8 de cada 10 adultos mayores presentan algún problema de salud crónico y cerca del 40 % de los hogares del país tienen al menos un miembro de 60 años o más.
Este panorama refuerza la importancia de los chequeos médicos periódicos. “Muchas veces, los adultos mayores se sienten bien, pero eso no significa que no haya un problema de salud en desarrollo. Los chequeos marcan la diferencia”, señala la Dra. Jessica Castro Flores, médico geriatra de la Clínica Anglo Americana.
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¿Qué exámenes de salud son básicos para los mayores de 60?
Después de los 60 años, hay un conjunto de evaluaciones que deberían realizarse al menos una vez por año:
- Historia clínica y examen físico
- Análisis de sangre y orina: hemograma, glucosa, lípidos, urea y creatinina
- Control de presión arterial y riesgo cardiovascular
- Evaluación cardiológica: electrocardiograma (ECG) o prueba de esfuerzo
- Detección de cáncer según sexo y edad: mamografía en mujeres, colonoscopía o prueba de sangre oculta en heces desde los 50 años, PSA y examen de próstata en hombres
- Actualización de vacunas según calendario
“La frecuencia de los controles depende del historial y del manejo de las enfermedades. En algunos casos basta con una revisión anual, pero en personas con diabetes o hipertensión los controles deben ser más cercanos”, precisa la especialista.

Los chequeos anuales incluyen análisis de sangre, evaluaciones cardiológicas y pruebas específicas según el historial de cada persona.
Pruebas adicionales según el riesgo
En personas con condiciones específicas, se recomiendan pruebas complementarias:
- En diabetes: hemoglobina glicosilada cada tres meses, evaluación renal y examen oftalmológico para descartar retinopatía.
- En cardiopatías: ecocardiograma y Holter.
- En salud ósea: densitometría en mujeres posmenopáusicas o en quienes presenten factores de riesgo.
- En pérdida de peso o masa muscular: dosaje de vitamina B12, vitamina D3 y perfil tiroideo, junto con evaluación nutricional.
- Tamizaje cognitivo, controles de visión, audición y salud oral.
En mujeres, además de la mamografía, se recomienda Papanicolaou y control de osteoporosis. En hombres, el PSA y la evaluación de la densidad ósea cuando corresponda. “No se trata de acumular pruebas, sino de recibir la orientación adecuada para cada caso”, enfatiza la Dra. Castro Flores.
El consejo final de la especialista es claro: no esperar a que aparezcan síntomas para acudir a un chequeo. La clave está en conversar con un médico de confianza y organizar un calendario de controles acorde al perfil de cada persona. Un plan sostenido facilita un envejecimiento saludable y con mejor calidad de vida.