La Conmebol felicita a Argentina por clasificar al Mundial tras empate de Bolivia ante Uruguay| últimas | DEPORTE-TOTAL

Bancada de Renovación Popular envía oficio a Dina Boluarte solicitando retiro de la competencia de la Corte IDH | Congreso | Pacto de San José | últimas | POLITICA

El cineasta palestino ganador del Oscar relata la paliza de colonos judíos antes de ser detenido por militares israelíes: “Venían a matarme” | Internacional

No es cualquier palo: chimpancés usan principios de ingeniería para fabricar sus herramientas | TECNOLOGIA

Uruguay vs. Bolivia EN VIVO: sigue el partido por las Eliminatorias 2026

Juan José Santiváñez en ceremonia de despedida del Mininter: “Nos vemos el 2026″ | POLITICA

Groenlandia: Vicepresidente de Estados Unidos visitará el viernes la base espacial estadounidense en la isla | JD Vance | Donald Trump | Usha Vance | Pituffik | Mike Waltz | Múte B. Egede | Mette Frederiksen | Últimas | MUNDO

Cerca de 15.000 hectáreas consumidas por incendios en Chile

Antibióticos hallados en ranas ofrecen una posible vía para combatir las superbacterias | TECNOLOGIA

Nicaragua vs. Guadalupe en vivo, Copa Oro: a qué hora juegan, canal que transmite y dónde ver


El médico del hospital Gemelli que se ha ocupado de Francisco durante su hospitalización, Sergio Alfieri, explica que hubo un momento “en el que se tuvo que decidir entre parar y dejarlo ir o probar con todos los medicamentos y terapias posibles, corriendo un riesgo muy alto”, en una entrevista publicada este martes en el diario “Corriere della Sera”.

Alfieri, que ya operó a Francisco, de 88 años, en pasadas ocasiones, afirma en esta entrevista que en ese momento “Francisco sabía que podía morir” y “los que estaban a su alrededor tenían lágrimas en los ojos” y él mismo dijo: “Esto es malo”.

LEE TAMBIÉN: Miles de fieles celebran en el Vaticano el alta del papa Francisco: “Es un milagro”

El peor momento de los 38 días que el pontífice argentino ha pasado en el hospital por una infección respiratoria que derivó en una neumonía bilateral fue el 28 de febrero, cuando tuvo un episodio de broncoespasmo.

“Por primera vez vi lágrimas en los ojos de algunas personas a su alrededor. Personas que, según he podido entender durante este periodo de hospitalización, lo quieren sinceramente, como a un padre. Todos sabíamos que la situación había empeorado aún más y que existía el riesgo de que no lo lográramos”, desvela Alfieri.

Y explica: “Tuvimos que elegir entre parar y dejarlo ir o forzarlo y probar todos los medicamentos y terapias posibles, corriendo el riesgo muy alto de dañar otros órganos. Y al final tomamos este camino”.

Banner Event Special

Tomó la decisión, revela el doctor del Gemelli, Massimiliano Strappetti, su médico personal, que conoce perfectamente los deseos del papa”, quien dijo: “Inténtalo todo, no te rindas. Eso es lo que todos pensábamos también. Y nadie se rindió”.

Señala que el papa se dio cuenta de que podía morir “porque incluso cuando su condición empeoró, estaba completamente consciente”.

Aquella noche fue terrible, él sabía, como nosotros, que quizá no sobreviviera a aquella noche. Vimos al hombre que estaba sufriendo. Pero desde el primer día nos pidió que le dijéramos la verdad sobre sus condiciones”, añade.

Durante días corrimos el riesgo de dañar los riñones y la médula ósea pero seguimos adelante, luego el organismo respondió a los tratamientos y la infección pulmonar mejoró”, describe.

SEPA MÁS: Los muertos en Gaza superan los 50.000 tras los últimos bombardeos israelíes

Después llegó el segundo episodio en el que el papa estuvo a punto de morir: “Estábamos saliendo del momento más duro, mientras el papa comía, vomitó y aspiró. Fue el segundo momento verdaderamente crítico porque en estos casos, si no se rescata con prontitud, existe el riesgo de muerte súbita además de complicaciones en los pulmones que ya eran los órganos más comprometidos. Fue terrible, realmente pensamos que no lo lograríamos”.

Recuerda Alfieri que hubo un momento particular: “Cuando, en el momento más difícil, me cogió la mano durante unos minutos como buscando consuelo”.

También destaca el buen humor del papa durante toda su estancia en el hospital y cuenta: “En cuanto empezó a sentirse mejor pidió dar una vuelta por la sala. Le preguntamos si quería que cerráramos las habitaciones de los pacientes pero en lugar de eso miró a su alrededor en busca de la mirada de los otros pacientes. Se desplazaba en silla de ruedas, un día salió de la habitación cinco veces, quizá más”.

Y explica que una tarde “le entregó el dinero a uno de los colaboradores y ofreció pizza a quienes lo habían ayudado ese día”.

Sobre el regreso al Vaticano, a su residencia en Santa Marta, Alfieri comenta que una mañana le dijo: “Sigo vivo, ¿cuándo nos vamos a casa?”.

Y sobre los rumores de que había fallecido, explica que el papa “siempre estaba informado de lo que ocurría y siempre reaccionaba con su ironía habitual”.

Respecto a la nueva etapa de convalecencia destaca que “hay prescripciones que se deben observar, como evitar el contacto con grupos de personas o con niños que puedan ser vehículo de nuevos contagios. Cuando se fue conversamos y prometimos no desperdiciar el esfuerzo que habíamos realizado”.

Pero él es el papa, no somos nosotros los que podemos dictar el comportamiento”, añade.

SOBRE EL AUTOR

Agencia EFE

Agencia EFE es una agencia de noticias internacional española que distribuye información a más de dos mil medios de comunicación en todo el mundo en los soportes de prensa escrita, radio, televisión e internet. Cuenta con una red con más de tres mil periodistas de 60 nacionalidades. Opera 24 horas al día desde al menos, 180 ciudades de 110 países.





Source link