miércoles, 10 septiembre, 2025
miércoles, 10 septiembre, 2025

Meta ocultó estudios sobre seguridad infantil en plataformas de realidad virtual, denuncian exempleados

Gatear, balbucear o caminar: qué esperar del desarrollo de tu bebé mes a mes en el primer año | HOGAR-FAMILIA

Australia desplegará una flota de drones de ataque submarinos

“Tal vez fuimos ingenuos, pero encontramos esperanza en medio de la pena”: Jaime Chincha y el último adiós de sus amigos | TVMAS

El horóscopo de hoy, miércoles 10 de septiembre de 2025: predicciones diarias con la Luna en Capricornio favorable para Leo

OpenAI respalda una película animada con IA para debutar en Cannes

Apple presenta el iPhone 17 Air en medio de la carrera por la IA

«Super Mario», el videojuego que cumple 40 años creciendo con sus fans

Seguros oncológicos privados no pueden negar tratamientos en Perú: ¿qué hacer en esos casos? | BIENESTAR

ejercicio «zona cero», la actividad con movimientos suaves y sin esfuerzo físico | BIENESTAR


Familiares de migrantes venezolanos deportados de Estados Unidos y recluidos en una prisión de alta seguridad en El Salvador denunciaron que tatuajes y cicatrices corporales fueron usados para criminalizar a sus parientes. Las familias exigen que el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, los envíe de regreso a casa.

La semana pasada, el presidente estadounidense, Donald Trump, invocó la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, para deportar a presuntos miembros de la pandilla venezolana Tren de Aragua. Los migrantes se encuentran retenidos en El Salvador en virtud de un acuerdo con el gobierno del presidente Nayib Bukele.

Tres familias, originarias del estado caribeño de Carabobo, afirman que sus seres queridos son inocentes, tras leer en redes sociales y enterarse de que las autoridades estadounidenses los han vinculado con la pandilla. “El hecho de que tengan tatuajes no significa que pertenezcan al Tren de Aragua. Hoy en día, todos tienen tatuajes”, dijo Josefina Romero, madre de Wild Chirinos Romero, deportado por Estados Unidos a El Salvador.



Source link