jueves, 14 noviembre, 2024
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No se sabe muy bien qué temía Flick del Young Boys para haber administrado tantas fuerzas en Pamplona. Los suizos pasaron por Montjuic como un equipo de anónimos sin defensa que se vencieron nada más pisar la cancha en cuanto comparecieron los refrescados Lamine, Raphinha y Lewandowski. Tres delanteros bien orientados por Pedri que sonrojaron a la defensa suiza, igual de vulnerable quieta que a balón parado, y capitalizaron una victoria terapéutica para los barcelonistas después de la dolorosa derrota en Mónaco. No había tiempo para especular y los muchachos azulgrana se tomaron tan en serio el partido que al descanso ya ganaban por 3-0.

5


Iñaki Peña, Iñigo Martínez (Andrés Cuenca, min. 83), Pau Cubarsí (Héctor Fort, min. 63), Jules Koundé, Alejandro Balde, Lamine Yamal (Frenkie de Jong, min. 74), Raphinha, Ferran Torres, Pedri (Ansu Fati, min. 63), Marc Casadó y Robert Lewandowski (Pau Víctor, min. 74)

0


Marvin Keller, Mohamed Ali Camara, Jaouen Hadjam, Tanguy Zoukrou, Lewin Blum (Zachary Athekame, min. 57), Ebrima Colley (Alan Virginius, min. 72), Sandro Lauper, Kastriot Imeri (Lukasz Lakomy, min. 81), Filip Ugrinic (Cheikh Niasse, min. 57), Joël Monteiro y Cedric Itten (Silvere Ganvoula, min. 72)

Goles
1-0 min. 7: Lewandowski. 2-0 min. 33: Raphinha. 3-0 min. 36: Íñigo Martínez. 4-0 min. 50: Lewandowski. 5-0 min. 80: Mohamed Ali

Arbitro Erik Lambrechts

Tarjetas amarillas
Ebrima Colley (min. 35), Filip Ugrinic (min. 39)

Los goles fueron cayendo sin mucho esfuerzo ni demasiada historia en una jornada que ni pintada para tomar el pulso a la competición y volver a ver a Ansu Fati, que solo había dispuesto de un par de minutos en Mónaco, y a Frenkie De Jong, ausente por lesión desde el 21 abril, cuando su tobillo derecho cedió en el estadio Bernabéu.

La alineación y los cambios estaban cantados después de la masiva rotación ante Osasuna. Ferran ya jugaba más o menos antes de que debutara el hoy lesionado Dani Olmo y Pablo Torre alternó una buena actuación en Villarreal con una más discreta en El Sadar. Así que Flick dispuso un once titular con Raphinha de enganche y tres puntas para certificar que priorizaba el partido contra el Young Boys al disputado en El Sadar. Una formación ya conocida y cuyos automatismos funcionaron muy rápido con un gol de Lewandowski. El polaco puso la punta de su bota izquierda para rematar un centro de Raphinha después de ser habilitado por Lamine. La aceleración resultó indefendible para una zaga contraria desorientada después de una larga combinación iniciada por Marc Casadó.

Los azulgrana atacaban por dentro y por fuera, presionaban mucho y recuperaban rápido, y defendían muy compactos ante el tupido Young Boys. Reducido Balde, el juego se volcó decididamente por el costado derecho de Lamine. La suerte del equipo suizo dependía solo del acierto del Barça. Las ocasiones, sin embargo, escaseaban porque los jugadores del Flick no daban velocidad a la pelota, el cuero siempre iba al pie con dos y hasta tres toques y les faltaba precisión para filtrar el pase y enfocar a Keller. No había noticias en cambio de Iñaki Peña. El balón no pasaba de medio campo y siempre viajaba en dirección a la portería del equipo de Rahmen. Hasta que un doble error de Koundé dejó a Colley con la portería por delante en el fondo donde canta la Grada d’Animació. El delantero cruzó el balón fuera del arco de Peña.

Aunque es el penúltimo clasificado de la Liga suiza, muy lastimado por las lesiones, el Young Boys se coló en la Champions con una victoria de mérito contra el Galatasaray. Aquel doble triunfo contra los turcos no tuvo continuidad en su estreno en la liguilla ante el Aston Villa: 0-3. El equipo, muy físico, ha perdido fiabilidad defensiva y mantiene por el contrario una interesante punta de velocidad en los contragolpes con jugadores como Colley. Ante la ralentización del juego, los goles llegaron a balón parado, a la salida de un córner el 2-0 y en una falta el 3-0. Raphinha recogió el rechazo a un tiro de Pedri en el saque de esquina e Íñigo Martínez, inédito hasta ayer como goleador, cabeceó el libre directo botado por Pedri. El pie del tinerfeño funcionó como un bisturí para rendir antes del descanso al Young Boys.

Los suizos no aprendieron a corregir sus marcas en las acciones de estrategia a su paso por el vestuario e Íñigo volvió a poner muy bien su testa en un córner para que anotara Lewandowski. El partido y los protagonistas eran los mismos ante el jolgorio de Montjuic. La efectividad de los presentes invitaba al entrenador a retrasar los cambios cuando los seguidores ya llevaban un rato invocando a Ansu Fati.

El delantero salió con la zamarra del 10 pasada la hora y se situó más como interior que como delantero en su estreno en Montjuic. La sorpresa por la demarcación de Ansu Fati apenas dejó reparar en un tiro al palo de Monteiro y en el esfuerzo del omnipresente Cadadó para resguardar también a Iñaki Peña. El siguiente en volver a escena fue Frenkie de Jong. La distracción, sin embargo, se situó por momentos en la grada y no en la cancha porque en el fondo ocupado por los seguidores suizos se encendieron más de una docena de bengalas ante la sorpresa de Montjuic.

El encuentro se fue apagando sin más jugada que un gol en propia portería de Camara después de un centro de Balde. Todavía le quedó tiempo a Flick para dar entrada al debutante Cuenca mientras la hinchada coreaba el nombre de Iniesta. El adiós del exazulgrana, previsto para el día 8, sirvió para poner el punto y final a un partido que costó acabar, y más después del gol anulado a Monteiro. Todo salió a pedir de boca para satisfacción de Flick. La próxima cita se prevé muy diferente porque llega el Bayern de Múnich, la bestia negra de los azulgrana, y ahí no hará falta ningún aviso del entrenador del Barça porque era el entrenador de los bávaros cuando el 8-2 de Lisboa.



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